lunes, 24 de agosto de 2009

El embarazo y la gripe A

Desde que empezó la pandemia ya han muerto 3 embarazadas por gripe A. Es evidente que las embarazadas constituyen un grupo de riesgo pero no por eso debemos alarmarnos.
Es evidente que al igual que en cualquier otra enfermedad si estás embarazada y te sientes mal, debes ir al médico y comentárselo también a tu ginecólogo.
Aún así, para mayor tranquilidad te aconsejo que visites la página web del Ministerio de Sanidad y consumo para más información sobre la gripe A.
En el siguiente enlace: http://www.msc.es/servCiudadanos/alertas/preguntasFrecuentes.htm#enlacef

Allí encontrarás desde información general de la gripe A a recomendaciones para evitar el contagio.

A continuación reproduzco la información contenida en la página del Ministerio de Sanidad y consumo sobre la gripe A y el embarazo y la lactancia:

¿Qué puedo hacer para protegerme/evitar contagiarme si estoy embarazada?

Las embarazadas son mas susceptibles a todas las infecciones porque su sistema inmunitario esta disminuido de manera natural. Por esto motivo y en relación a la Gripe, es importante que cumpla de manera continuada las mismas medidas preventivas que la población general.

Si esta embarazada, evite el contacto cercano con personas enfermas.

¿Qué debo hacer si estoy embarazada y he estado en contacto con un enfermo de Gripe A (H1N1)?

Todos hemos podido estar en contacto con enfermos de la gripe A (H1N1). Sin embargo, si ha estado en estrecho contacto con alguien que ha desarrollado una gripe A, entre un día antes de desarrollar los síntomas y hasta 7 días después del inicio de los mismos debe ponerse en contacto con su medico/ servicio sanitario lo antes posible para que valore su situación.

¿Qué ocurre si, a pesar de todas las precauciones se infecta con el nuevo virus de la gripe A (H1N1) una mujer embarazada?

La mayoría de mujeres embarazadas que han pasado la gripe han tenido sólo síntomas leves.

Pero durante el embarazo, y especialmente en el segundo y tercer trimestre, existe un mayor riesgo de complicaciones asociado al nuevo virus de la gripe. Este riesgo aumentado se ha observado en pandemias anteriores y en la gripe estacional.

Por ello, si está embarazada y comienza con síntomas de gripe debe ponerse en contacto con su medico/servicio sanitario lo antes posible para que realicen una valoración individual de su caso.

La fiebre suele estar presente en el 97 % de los casos de mujeres embarazadas que padecen la gripe A. Si tiene fiebre, debe bajarla de inmediato con paracetamol. Paracetamol es un medicamento seguro en el embarazo y la fiebre se ha asociado a un incremento de defectos del tubo neural cuando ocurren en el primer trimestre de gestación y a otros problemas neonatales. Controlar la fiebre es un objetivo prioritario del tratamiento médico.

Aunque en la fase actual de la pandemia por el virus de la gripe A (H1N1) solo se aconseja tomar muestras para confirmar el diagnostico en los casos graves que requieren hospitalización. La embarazada constituye una excepción y debe confirmarse el diagnostico, para evitar un tratamiento innecesario.

¿Puedo estar tranquila en el embarazo al tomar antivirales si mi médico me los indica?

Como sabe el embarazo es una época muy especial en el que un nuevo ser esta creciendo en su interior. Por este motivo existen unos límites de seguridad muy estrictos para el uso de medicamentos en embarazadas. Las embarazadas no forman parte de los grupos de prueba de los medicamentos y por lo tanto muchas veces no pueden descartarse totalmente los efectos adversos. Muchas embarazadas han tenido que ser tratadas por complicaciones de la gripe con estos medicamentos y si bien no se han notificado hasta ahora efectos adversos graves, es mejor ser prudentes y solo usarlos cuando una valoración individual cuidadosa nos indique que los beneficios podrán superar los posibles inconvenientes.

¿Puede continuarse la lactancia materna si se tiene gripe por nuevo virus A (H1N1)?

La leche materna contiene anticuerpos que protegen al bebé de numerosas enfermedades. Así, se aconseja mantener la lactancia aunque la madre contraiga la gripe o haya estado en contacto con casos confirmados o sospechosos, o este tomado antivirales por prescripción médica. La cantidad de antiviral que se segregan en la leche materna es insignificante.

Para evitar la transmisión de la gripe al niño, la madre debe ser especialmente cuidadosa con las medidas higiénicas habituales. Y podría usarse una mascarilla ya que si esta enferma podría toser durante la toma y sus secreciones alcanzar al bebe. La mascarilla minimiza la posibilidad de que pueda contagiar a otros. En el caso de que la enfermedad complique la lactancia o el riesgo de transmisión respiratoria de la enfermedad sea muy probable, se recomienda extraer la leche con un dispositivo extractor y administrarla después al bebé.

domingo, 23 de agosto de 2009

Canastilla

La Canastilla es el conjunto de cosas que debes llevar al hospital en el momento del parto, tanto para ti como para el bebé.
Se considera que es una buena idea tenerla preparada desde el 7 mes por lo que pueda pasar, a fin de cuentas el parto podría adelantarse y así no tendrías que ponerte a hacer la maleta en el último momento.

Normalmente es el ginecólogo o la comadrona quien te da la lista de lo que tienes que llevar y puede variar sensiblemente de un hospital a otro. En algunos hospitales te facilitarán todo el material de limpieza del bebé, incluido los pañales.
He añadido a la lista, otras cosas que pueden serte muy útil.

Ten en cuenta que el número de mudas a llevar viene dado porqué pasarás tres días en el hospital en caso de parto natural y 5 días en caso de cesárea. A esto hay que añadir la ropa de salida, tanto para ti como para el bebé.

Para el bebé:

- 4 mudas completas del bebé:
- 4 camisitas (camisetas de ropa interior para el bebé, anudadas con lazo a la espalda.
- 4 ranitas (braguitas e bebé). Puedes comprar las ranitas y las camisitas por separado o bien en conjunto. En el hospital te suelen pedir estos conjuntos y ponerlos antes que el body porqué facilita a las enfermeras la cura del ombligo.
- 4 conjuntos de bebé: jersey + polainas (pantalón con patuco integrado).
- 2 arrullos (mantitas del bebé)
- 1 paquete de pañales desechables de bebé (talla recién nacido).
- 1 gorrito.
- Chupetes (esto es opcional y dependerá si sois partidarios o no de usar chupete.

- Neceser bebé:
- 1 Esponja natural
- 1 frasco de colonia
- 1 frasco de jabón
- 1 frasco de leche hidratante
- 1 frasco de crema para el culito
- 1 cepillo
- gasas y alcohol de 70º (para curar el ombligo)

Para la mamá:

Ropa:
- 3 camisones con abertura por delante. Esto es porqué tanto el médico como las enfermeras tendrán que hacerte controles y es más cómodo si no llevas pantalones. Además al ser abierto por delante hasta el pecho, te será más fácil y cómoda la lactancia materna.
- braguitas de papel. Se compran en la farmacia, y son recomendables porqué tras el parto tendrás los loquios (una superregla que dura varios días) y así evitarás manchar y estropear braguitas ni tenerlas que lavar.
- 2 sujetadores de lactancia.
- Bata
- Zapatillas
- Ropa para el día de salida (algo cómodo).

- Varios:
- Secador de pelo. Cada vez que vayas al baño tendrás que lavarte con agua tibia y jabón para evitar que se infecten los puntos. El secador resulta muy útil para secarse el pubis tras lavarse y evitar así tener que secarse y tocar los puntos.
- Cargador del móvil. Aunque sólo sean tres días lo vas a necesitar.
- Teléfono móvil.
- bolsas de plástico: para guardar la ropa sucia...
- Extractor de leche: si vas a dar el pecho, no es mala idea llevártela para facilitar la producción de leche en caso que el bebé sea un poco remolón.

- Neceser: básicamente debe incluir lo mismo que te llevarías de viaje más algunas cosillas que he resaltado en cursiva y que son imprescindibles.

- Compresas super (nadie está por la labor de ponerse un tampón, : ) )
- Copetes (discos absorbentes para el pecho).
- Crema antigrietas para el pecho.
- Champú.
- Gel de ducha.
- Crema hidratante (y todas las cremas tanto de cara como de cuerpo o manos que suelas usar normalmente).
- Crema antiestrías: tanto de cuerpo como de pecho que has estado usando durante el embarazo. No hay que bajar la guardia ya que sigue siendo muy posible que te salga alguna estría si no te cuidas durante el postparto.
- Cepillo de dientes y crema dental.
- Cepillo y peine.
- Gomina, espuma.... lo que uses normalmente.
- Maquillaje (si te maquillas normalmente, te recomiendo que lo sigas haciendo, ya que solemos hacer bastante mala cara tras el parto).
- Colonia.
- Lima.

Documentación:
- Carnet o libro de la embarazada y todas las analíticas y cultivos. Llévate todos los papeles que tienes del embarazo.
- Libro de familia y D.N.I.
- Tarjeta de la mútua.

Algunas recomendaciones finales:

1. Puesto que papá puede quedarse a dormir todos los días y que no necesita ir a casa si no quiere, ya que puede ducharse y cambiarse en el baño de tu habitación, te recomiendo que él también se lleve su propia bolsa con neceser, pijama y mudas.
2. En muchas tiendas verás que se vende la Canastilla (es decir la bolsa que la contiene). Ten en cuenta que te sirve cualquier mochila o bolsa de viaje de fin de semana. Se finalmente decides comprar una (a veces van en conjunto con el cuco o con el coche de paseo), te recomiendo que sea de lona en lugar de tela y que tengas en cuenta si te va a ser útil tras el paso por el hospital. En el hospital estarás tres días y no vale comprar nada especialmente para esos días.
3. Una amiga organizó la canastilla del bebé con bolsitas de plástico con autocierre. En casa bolsa, colocaba un muda completa del bebé (camiseta, ranita y conjunto) de manera que cada día cuando llevaban al bebé a la nursery, le daba a la enfermera una bolsa con su ropa ya lista.
4. Recuerda que en caso de cesárea, debes llevar más mudas o bien hacer que las flamantes abuelas se lo lleven y lo laven en casa.

sábado, 22 de agosto de 2009

La elección del ginecólogo

Es evidente que el tratamiento del embarazo y la asistencia al parto no es el tratamiento de una enfermedad sinó el seguimiento de algo natural. Pero aún así, no creo que haya ninguna otra especialidad médica que trate un tema tan sensible y emocional como es el embarazo y el parto.

Creo que una parte clave en que mi embarazo fuera tan bien y en qué viviera tan tranquila la cesárea fue la confianza que tenía en mi ginecólogo y comadrona.
El sentirte apoyada, bien informada y con un seguimiento puntual y amable hacen que estés tranquila y por tanto ayuda a que todo transcurra con normalidad.

En mi caso, un tiempo antes de pensar en tener al bebé, me inscribí en una mútua de salud privada. Por supuesto, el seguimiento de tu embarazo y el parto pueden ser llevados a cabo a través de la seguridad social pero yo preferí un seguimiento más personalizado. En la seguridad social, la masividad de la demanda va en detrimento de la calidad del servicio y yo quería estar tranquila.

Hay varias cosas que uno debe tener en cuenta a la hora de elegir un ginecólogo:

- es tu ginecólogo habitual? es posible que haga años que te visitas con tu ginecólogo y te sientes cómoda con él. En ese caso, adelante te sentirás tranquila y bien atendida.

- te asistirá él al parto? en algunas clínicas privadas o en la seguridad social, te asiste un ginecólogo del equipo, así que te atenderá el ginecólogo que esté de guardia... aunque no lo conozcas. En mi caso, el ginecólogo que escogí asiste personalmente a todos los partos, de manera que tienes la tranquilidad de saber que conocerás a quien está contigo. Y eso, creéme te da confianza y tranquilidad.

- qué experiencia y habilidades tiene tu ginecólogo? este punto es muy importante y te dará seguridad. Actualmente hay un número importante de cesáreas, más acentuado en la sanidad privada, cuyos motivos reales vienen determinados por no querer asistir partos naturales en fin de semana o en partos naturales que pueden ser más complejos de lo habitual.
Cuánta más experiencia tenga tu ginecólogo más probable será que opte por un parto natural, aunque sea instrumentalizado que no practicar una cesárea para evitar complicaciones.
A nivel de habilidades, me refiero por ejemplo a que el ginecólogo sea también ecógrafo. Si es así, en lugar de tener que hacer dos visitas por mes, harás sólo una y será el propio ginecólogo quien te mostrará el bebé y te comentará su estado y evolución.
También puede resultar interesante saber si ha realizado tratamientos de fertilidad.

En mi caso, tuve la suerte de contar con un ginecólogo jóven pero con muchas experiencia. De hecho, a menudo le llaman de la clínica para echar una mano en partos complejos o cesáreas de urgencia. Ha asistido numerosos partos de nalgas y tan sólo practica cesáreas cuando es imprescindible.

Para muestra mi caso, mi bebé venía de nalgas. Cualquier otro médico, habría programado una cesárea, pero él espero a que surgiera el parto espontáneo puesto que había posibilidades que se diera la vuelta en el último momento o que se encajará bien, yo dilatara lo suficiente y naciera el bebé de nalgas.
Me puse de parto la madrugada de un sábado y al no encajarse, finalmente me practicaron una cesárea.

- dónde está su consulta? cuánto más cerca de tu casa o de tu trabajo, más cómodo. Pero si te digo la verdad, lo más importante no es si está cerca o lejos. En mi caso, me cruzaba la ciudad cada mes, cogiendo el metro y luego los ferrocarriles para llegar a su consulta. Así de paso, haces un poco de ejercicio que las embarazadas solemos hacernos un poco las remolonas.

- cuándo conocerás a tu comadrona? en la mayoría de casos, tanto en la privada como en la pública, se conoce a la comadrona en la recta final del embarazo. En las últimas 2 ó 3 semanas ya que es el momento en el que se lleva a cabo el seguimiento por monitorización del embarazo.

En mi caso, conocí a la comadrona en el tercer mes. Cada mes cuando iba a revisión me visitaba el ginecólogo y la comadrona: quien me pesaba, me tomaba la tensión...
Tuve además la suerte de contar con Esther: una comadrona con muchísima experiencia y muy cariñosa que estuvo todo el tiempo a mi lado en el parto y que me visitaba a diario en la clínica.
De hecho, había asistido tantos partos que podía traer sin problemas al bebé en un parto natural, cosa que le recordaba a veces a mi ginecólogo, : )
Para más información, os diré que Esther trabajaba con el padre de mi ginecólogo, también ginecólogo y que asistió al parto en el que nació él. Imaginaos la relación, era como estar en familia.

- Disponibilidad del médico: a mí me dio muchísima tranquilidad cuando en el primer control, mi ginecólogo me dio el teléfono fijo y móvil de la comadrona y los teléfonos de todos sus consultorios. Además, la comadrona me comentó que la llamara en cualquier momento para preguntarle lo que fuera o si sentía algo fuera de lo normal.

- en qué clínica te asistirán? En primer lugar, debes tener en cuenta que cada ginecólogo asiste los partos en una única clínica (a veces quizás dos) pero si tienes predilección por alguna clínica en particular, ya sea porqué han atendido alguna amiga allí y te habló muy bien del trato... ten en cuenta que este factor limitará la elección del ginecólogo.
Por experiencia te diré que lo que más te importará será el trato humano. Por supuesto que está muy bien si la clínica es nueva y todo está reluciente, pero como el trato sea frío y distante te dará igual si estás en el Hilton. En mi caso, parí en la Clínica del Pilar de Barcelona. A simple vista, puede parecer un lugar sencillo y de pocos lujos.
Pero para mi gusto y el de muchas otras mujeres que conozco y que han parido allí, tiene lo más importante:
- una habitación privada para cada mami en la que papá se puede quedar a dormir y hacerte compañía.
- unas enfermeras y ATS muy dulces que te tratan con cariño y te ofrecen su apoyo y ayuda en todo momento.
- la flexibilidad de que puedas elegir si el bebé pasa la noche contigo o en la nursery sin ser obligatorio.
- control médico riguroso: tanto de la mamá como del bebé.

En fin, por si no tienes un ginecólogo habitual, o hay algún punto que no te acaba de buscar, aquí pongo los datos del ginecólogo que me asistió:


Dr. Guillermo Ripoll Espiau
Col. 4394
C/ Madrazo 24-28, entlo. 1ª
08006 Barcelona
Telf. 93 218 88 32

Involucrar a papá

El papel de papá es evidentemente más pasivo que el de mamá en lo referente al embarazo y al parto.
Ahora bien, su participación será tan activa según tu lo involucres en el proceso.
La mamá tiene nueve meses de preparación antes de la llegada del bebé, en el que ya lo quiere y lo siente. En cambio papá queda más aislado de esta relación y sólo tu puedes hacer que lo siente igual que mamá.

Mis recomendaciones para involucrar a papá son:

- haz que te acompañe a todas las revisiones del ginecólogo. Así no sólo seguirá el embarazo sino que además podrá ver al bebé en las ecografías.
- haz que te acompañe a todas las clases de preparto. Allí no sólo se explica como pujar sino como cuidar del bebé, y eso es tan responsabilidad suya como de la mamá.
- cuando empieces a sentir al bebé, haz que ponga la mano sobre tu barriga y guíale para que pueda sentirlo él también. Es una vivencia preciosa.
- comparte y haz que participe en todo lo referente al bebé: escoger el nombre, decorar su habitación...
- haz que participe en el parto: si no es cesarea puedes compartir la experiencia del nacimiento con él y vivirla juntos. De manera que tu te sentirás acompañada y más relajada.
- una vez haya nacido el bebé comparte su cuidado con él: darle el biberón (si no le das el pecho), bañarlo, cambiarlo, acunarlo, pasearlo, llevarlo al médico, ...
Cuánto antes interaccione con el bebé, antes lo reconocerá. Ten en cuenta que al principio, el bebé sólo conoce a mamá, por su olor, el timbre de su voz y el sonido de su corazón. Hasta los tres meses aproximadamente, el bebé no conocerá a papá, y si además no comparte mucho tiempo con él, el bebé no confiará en papá y sólo se calmará con mamá.

Muchas mamás olvidan a papá durante el embarazo, ya no digamos cuando ha nacido el bebé. Papá no debe sentirse desplazado por el bebé sino que debe sentirlo como suyo. La adaptación a la llegado del pequeño será más suave si ambos padres participan activamente y la relación de pareja no se resentirá.

Cuánto tiempo tardaré en quedarme embarazada?

De media, una mujer tarda un año en quedarse embarazada. Es decir, que habrá mujeres que tardarán 6 meses y otras que tardarán dos años.

Lo mejor es dejar de tomar precauciones y hacer vida normal.
Además de problemas físicos que pueden impedir la concepción, el estado de ánimo tiene mucho que ver, la ansiedad es el mejor anticonceptivo que hay.
Así que estar relajada y de buen humor es la mejor ayuda que puedes tener.

Para quedarte embarazada tan sólo tiene que dejar de tomar precauciones y mantener relaciones sexuales con tu pareja con normalidad. Digo normalidad porque no es más fácil quedarse embarazada por copular cada día, : )
De hecho, la calidad del esperma es mejor tras 48 horas, así que lo más indicado sería tener relaciones cada 3 días.
Para que te quedes embarazada, debe haber ovulado. Normalmente, se ovula entre una semana y diez días después del primer día de la menstruación. En mujeres de ciclo menstrual irregular es posible que la ovulación tenga lugar en otras fechas.

Es recomendable también que antes de empezar vayas al ginecólogo a revisión, ya que la presencia de una infección o de hongos pueden evitar el embarazo. De hecho, estas enfermedades son la causa más común de dificultades en quedarse embarazada y es por este motivo que la media es relativamente alta, ya que muchas mujeres no acuden a revisión hasta que detectan que algo no va bien.
Ves desde inicio al ginecólogo y de esta manera, te asegurarás que estás bien y que nada impide el embarazo.

Si tras un año sin tomar precauciones no te has quedado embarazada, es conveniente una nueva visita al ginecólogo que seguramente indicará un estudio de fertilidad de la pareja pasado un tiempo prudencial.

Expectativas, miedos y otras paranoias...

Después de mi experiencia, creo que lo más importante que marca todo el embarazo, el parto y criar a tu bebé son las expectativas.
Al igual que en cualquier otro aspecto de la vida, tu imaginación y la idealización de lo que va a ocurrir puede jugarte una mala pasada.

Durante el embarazo y etapas posteriores, tendrás un aluvión de sentimientos, emociones y preocupaciones. Lo mejor, desde mi punto de vista, es vivirlo con naturalidad.
Es normal que tengas expectativas y miedos: a fin de cuentas estás viviendo algo que nunca habías experimentado antes y la llegada del bebé cambiará por completo tu vida y tus prioridades.
Ahora bien, una cosa es pensar y asumir lo que está pasando y otra es vivir esta experiencia tan increible con miedo o con angustia.
Cada persona tiene sus propios miedos, pero muchos de ellos son compartidos por todas las mamás y papás. Saber que no eres el único que los tiene te dará una tranquilidad adicional.
Aquí pongo los míos como ejemplo:

- Llevaré bien el embarazo?: antes de quedarme embarazada, estuve un año en tratamiento con antidepresivos por sufrir un trastorno de ansiedad. Cuando estaba bastante recuperada y ya no tomaba medicación me quedé embarazada y tenía miedo de sufrir ansiedad durante el embarazo y que esto afectara al bebé. El resultado final fue que no me angustié, viví muy tranquila todo el embarazo con una sonrisa de tonta perpetua grabada en la cara. Las molestias típicas hacían que sólo pensara en el bebé y no en otras cosas. Y en cuanto empecé a sentirlo tenía todos mis sentidos focalizados en él.

- Tendré un parto prematuro? Por alguna razón, nunca pensé en el aborto espontáneo pero sí en el parto prematuro. Se lo comenté a mi ginecólogo y él me dijo, por qué piensas en eso? y yo le contesté: no lo sé; a lo que él respondió con una sonrisa... yo tampoco! Finalmente, debo decir que Samuel nació en la semana 38, pero no, no fue un parto prematuro.

- Sobre el parto recaen la mayoría de los miedos, así que los comentaré en el apartado del parto.

- Seré capaz de cuidar bien de mi bebé? seré una buena madre? La verdad es que a todo se aprende, así que sin lugar a dudas cualquier persona acaba con la práctica, sabiendo ocuparse prefectamente de las necesidades del bebé. Respecto a ser un buen padre... no sé como se puede valorar. Pero tras cuatro meses con mi bebé, puedo decir que hoy por hoy lo que reclama de mí es que lo quiera, y eso se me da muy bien! : )

Como recomendación final, diré que todo es más fácil si:

- no lees información en libros, webs o revistas sobre dificultades del embarazo o del parto. La mayoría sólo se dan en muy pocos casos y te haces flaco favor si las conoces todas y te chequeas continuamente por si te puede estar pasando a ti.

- te repites que el cuerpo humano está especialmente diseñado para concebir. A fin de cuentas, la prioridad de un ser vivo es su reproducción. Por increible que parezca, el cuerpo funciona como una máquina de relojería y si algo no va perfecto, tu ginecólogo lo subsanará.

- si está leyendo el blog, es porqué vives en el primer mundo. Hay millones de mujeres que viven el embarazo y el parto sin asistencia médica y salen adelante. En tu caso, tendrás asistencia personalizada a lo largo de todo el proceso.

- le preguntas a tu ginecólogo o comadrona cualquier duda que tengas por tonta que te parezca.

- compartes tus miedos con amigas que ya sean madres: verás como te comprenden y le quitan hierro.

- compartes tus miedos con tu pareja: así entenderá tus cambios de ánimo y todas las emociones y pensamientos que estás sintiendo.

- vives esta experiencia como lo que es: el milagro de la vida. No creo que haya nada comparable a seguir día a día como de la nada se crea vida en tu interior.